Perder peso a cualquier edad puede ser un desafío, pero parece mucho más difícil cuando eres más mayor. Sí, hemos dicho difícil pero no imposible, especialmente si sigues estos consejos aprobados por los expertos. Si quieres perder peso después de los 50 años, tómatelo en serio y mantén una actitud positiva.
Consejos para perder peso después de los 50 años
Reduce tu estrés
La mediana edad es una etapa en la que el estrés y la preocupación aumentan. Además de administrar tu vida personal, puede que tengas un trabajo estresante, criar a tus hijos, pagar una hipoteca, etc., por no mencionar que tienes que empezar a pensar en la jubilación y en la posibilidad de que tus hijos abandonen el hogar y experimentes el «síndrome del nido vacío». Cuanto más estresado estés, menos probabilidades tienes de hacer las cosas que debes hacer para perder peso después de los 50 años, como hacer ejercicio y comer bien.
Contacta con profesionales
Si ninguno de los métodos que has probado anteriormente funcionan, lo mejor es que consultes a un especialista para que te ayude a perder peso después de los 50 años. Estos médicos altamente especializados pueden ayudarte a solucionar cualquier problema y poner en marcha tu plan de pérdida de peso.
No te rindas
Los estudios han demostrado que los tratamientos probados por la ciencia para la obesidad y el control del peso funcionan tan bien en las personas mayores como en la población general. Lo mejor es mantener la calma y no desanimarte.

Revisa tus medicamentos
A medida que envejeces, más medicamentos recetados y de venta libre tomas para tratar tus problemas de salud relacionados con la edad. Algunos medicamentos, incluidos los antidepresivos, pueden causar aumento de peso, así que asegúrate de que cualquier aumento de peso inexplicable no sea un efecto secundario de un medicamento.
Duerme suficiente
Los patrones de sueño cambian con la edad. Para las mujeres con menopausia, los sudores nocturnos pueden significar despertarse con frecuencia para cambiar las sábanas o ponerse otro pijama. Esta pérdida de sueño puede hacer que sea más difícil perder peso. La grelina es la hormona manda señales cuando necesitas comer, y cuando estás privado de sueño, la grenila aumenta. Por su parte, la leptina que es la hormona que indica cuando estás saciado, se reduce cuando no tienes sueño. A más grelina menos leptina, lo que se traduce en un aumento de peso. La buena noticia es que la melatonina, un complemento para mejorar el sueño, también puede tratar los síntomas de la menopausia.
Prueba el ayuno intermitente
El ayuno intermitente está de moda y entre los estudios realizados, algunos sugieren que un tipo de ayuno conocido como la dieta 16: 8 puede ayudarte a perder peso. Durante las 16 horas del día, por ejemplo, desde las 6:30 p.m. hasta las 10:30 a.m., no comes, y durante las otras ocho horas del día, puedes hacer tus comidas. Con este sistema, consumes menos calorías y pierdes más grasa.
Aumenta tu consumo de proteínas
La masa muscular disminuye con la edad, y como el músculo quema más calorías que la grasa, el metabolismo también disminuye, lo que provoca aumento de peso. Según un estudio publicado en el American Journal of Clinical Nutrition, comer una cantidad igual de proteínas en las tres comidas puede desarrollar la fuerza muscular en personas mayores de 50 años.
Rompe con la dieta
Ahora puede ser el momento de abandonar tu dieta, por lo menos durante algunos días, ya que puede ayudarte a perder peso según las investigaciones. Los participantes de diferentes investigaciones que dejaron de hacer dieta durante dos semanas, perdieron más peso durante los estudios y no ganaron kilos de más después de acabarlo.
Come más verduras
Cambia el orden de los alimentos que comes. Por ejemplo, cuando comes pan antes de las comidas, el azúcar en la sangre aumenta junto con la producción de la hormona insulina, lo que incrementa las posibilidades de ganar peso. Comer verduras, proteínas y carbohidratos al final tiene un profundo impacto en los niveles de azúcar en la sangre y hace que los niveles de grelina bajen.
Haz entrenamiento de fuerza
Con la edad, las personas tienden a perder masa muscular y eso hace que sea más difícil perder peso porque tener menos masa muscular significa una menor tasa metabólica. Los ejercicios de fuerza pueden cambiar la composición de los músculos de forma que los hace más activos metabólicamente. Incluye en tus rutinas ejercicios de peso libre o máquinas una o dos veces por semana.
Toma los mejores suplementos
Si tu dieta y plan de ejercicios ya no producen resultados, es posible que tengas deficiencias de una o más vitaminas o nutrientes esenciales. Consulta con tu médico sobre la posibilidad hacerte un análisis y de incluir suplementos en tu dieta.
No te peses
La báscula no siempre cuenta la realidad cuando intentas perder peso después de los 50 años. En vez de pesarte, mide la circunferencia de tu cintura con una cinta métrica. Si el tamaño de tu cintura es menor que cuando empezaste tus planes para perder peso, puede tomarla como medida de referencia en la reducción de grasa. Tu peso puede no cambiar, pero el tamaño de tu cintura sí.