Una vez que las mujeres pasan el embarazo, comienza la ardua tarea de bajar de peso y tonificar el cuerpo de nuevo, pero resulta muy complicado al tener que cuidar al bebé todo el día, lo que te da la impresión de no tener tiempo para nada.
Pero ¡todo es posible!, si estableces una rutina lograrás hacer ejercicios en casa en los que involucrarás a tu hijo, de esta manera pasaran algunos minutos divertidos, estrecharán lazos y a la vez que logras tu objetivo que es bajar algunas tallas.
A continuación, te dejamos una serie de 6 actividades que puedes hacer en tu hogar, solo necesitas a tu bebé y listo, ¡a trabajar!
1. Para ejercitar brazos y piernas toma a tu bebé como lo muestra la fotografía, flexiona las piernas como si fueras a sentarte y luego sube y levanta a tu hijo.
2. Siguiendo con brazos coloca a tu hijo acostado sobre una colchoneta, luego ponte en posición de flexiones, sube y baja, veras como tu bebé disfrutará este ejercicio.
3. Para hacer glúteos acuéstate boca arriba con las piernas dobladas y coloca al bebé sentado en tu barriga, luego sube poco a poco, aprieta los glúteos cuando estés arriba y cuenta hasta 5, luego baja lentamente.
4. En la misma posición anterior, sube las piernas y acuesta a tu bebe sobre ellas, que su cara quede mirando la tuya, sube y bajas las piernas varias veces, de esta manera fortalecerás piernas y glúteos.
5. Para fortalecer tus abdominales acuesta a tu hijo boca arriba en la colchoneta y luego baja en plancha sobre tus codos, mantén la posición durante 8 a 10 segundos, puedes realizar 4 series.
6. Otro ejercicio para e abdomen es acostarse boca arriba, colocar al bebé sentado sobre tu barriga y que su espalda descanse en tus piernas, luego levanta la cabeza y míralo por unos segundos. Baja y repite cuantas veces puedas.
Si en tu casa hay escaleras es aún mejor, carga a tu bebé como te sea más cómodo y sube y baja varias veces, también puedes colocar a tu hijo en tu espalda y en el primer escalón subir una pierna mientras que la otra la estiras hacia atrás. A tu rutina de ejercicios puedes agregar un paseo caminando con paso acelerado a la vez que empujas la carriola.
Como ves ya no hay excusas para no ejercitarte, solo es cuestión de trazar una meta y comenzar, con el tiempo verás que tanto tú como tu bebé sentirán la necesidad de compartir ese tiempo juntos.