Normalmente, llevando una dieta sana y equilibrada el cuerpo consigue todas las vitaminas y minerales que necesita para estar fuerte y sano. Sin embargo, cuando se practica deporte de forma regular una buena dieta puede no ser suficiente, en este caso necesitarías unos complementos nutricionales en tu entrenamiento para cubrir las necesidades del organismo.
¿Para qué son los complementos nutricionales?
Hay que tener muy claro que los complementos nutricionales no reemplazan a una dieta saludable. Que un deportista consuma este tipo de productos no significa que tenga que descuidar su alimentación, sino todo lo contrario. Los complementos nutricionales están pensados solo para ayudar a conseguir los nutrientes que le faltan al cuerpo y que necesita para estar fuerte y sano. Es un complemento, no un sustitutivo. Además, las cantidades las tiene que marcar siempre un médico.
Hay numerosos estudios que demuestran que los complementos nutricionales ayudan a mejorar el entrenamiento, la recuperación y el rendimiento de un deportista.

¿Qué aportan los complementos nutricionales en tu entrenamiento?
Este tipo de productos aportan micronutrientes (vitaminas y minerales) al cuerpo, que son los que controlan y regulan el metabolismo. Cualquier persona, deportista o no, necesita estos elementos o podría padecer problemas de salud.
Minerales
Cuando a pesar de llevar una dieta sana y variada el cuerpo tiene una falta de calcio, hierro, zinc o magnesio, se puede recurrir a los complementos nutricionales.
El calcio es necesario para que los huesos estén fuertes, el hierro para transportar oxígeno y aumentar el rendimiento deportivo, el zinc facilita la regeneración de lesiones musculares y modifica la acumulación de ácido láctico y el magnesio ayuda a los músculos a relajarse y a que el corazón funcione correctamente.
También son muy importantes los electrolitos (sodio, cloro y potasio). Una falta de electrolitos puede provocar calambres musculares, debilidad y apatía. En caso de que el cuerpo esté bajo de alguno de estos electrolitos también se puede recurrir a complementos nutricionales.
Vitaminas
Además de los minerales anteriores, el cuerpo necesita vitaminas. La vitamina B da energía, ayuda a tener un buen funcionamiento cardíaco y reduce el cansancio y la fatiga. La vitamina A, mientras tanto, ayuda en el metabolismo del hierro. A su vez, la C hace que huesos y cartílagos estén sanos y fuertes, además de reforzar el sistema inmune. La vitamina D es clave para una correcta función muscular.

Otros nutrientes
Aunque siempre se habla de minerales y vitaminas, los complementos nutricionales pueden aumentar los niveles de otros elementos como la L-Carnitina y la Coenzima Q10 o aportar hidratos de carbono, proteínas o aminoácidos.
Tomar suplementos de L-Carnitina antes de practicar un ejercicio de intensidad alta puede ayudar en la posterior recuperación y hasta reducir las agujetas. Y la Coenxima Q10 puede mejorar el rendimiento físico sobre todo en ejercicios aeróbicos, también tiene efectos antioxidantes y favorece el metabolismo de lípidos.
Los suplementos a base de hidratos de carbono sirven para darle un extra de energía al organismo y las proteínas o aminoácidos ayudan a que los músculos se recuperen más rápidamente.
¿Quién puede necesitar complementos nutricionales?
Los deportistas no son los únicos que pueden necesitar en algún momento complementos nutricionales. Las personas mayores a menudo carecen de algunas vitaminas, así como las mujeres en edad fértil suelen necesitar complementos de hierro y las embarazadas, además, también de calcio o ácido fólico. Los niños también pueden tener algunas faltas, sobre todo de hierro y vitaminas. Incluso los vegetarianos y veganos, aunque lleven una dieta muy marcada, pueden necesitar un suplemento de vitamina B12 y hierro, que son nutrientes de origen animal.
En cualquier caso el consumo de complementos nutricionales tiene que estar supervisado por un profesional médico porque el exceso de un nutriente puede ser tan perjudicial como una carencia.