El agua es un elemento esencial para nuestra salud, es por ello la importancia de incluirla en nuestro día a día, principalmente porque no contiene grasas, ni calorías, o carbohidratos, ayuda a perder peso, sustituyendo las bebidas que tienen un alto componente en azúcares como el alcohol, los zumos envasados, o el café. Por otra parte, reduce las ganas de comer, por eso dietistas recomiendan beber un vaso de agua antes de las comidas. Obligarte a beber agua aunque sea antes o durante las comidas es muy beneficioso, ya que aporta las energías necesarias para mantener una buena actividad diaria y no estar deshidratados, cansados o desganados. Sobretodo es de especial relevancia en épocas de calor, para mantenernos hidratados durante todo el día así como cuando practicamos deporte, ya que al expulsar el sudor junto con el desgaste del ejercicio físico, eliminamos gran cantidad de componentes esenciales para mantener la hidratación.
Es importante beber agua porque aporta una serie de beneficios vitales para nuestra salud e interviene en prevenir numerosas enfermedades; en primer lugar, evitas posibles ataques al corazón, las personas que padecen enfermedades cardiovasculares, se les recomienda beber abundante agua para estabilizar el flujo sanguíneo y así reducir los posibles riesgos a sufrir un infarto. Además evitas posibles dolores de cabeza, muchas veces cuando nos duele la cabeza acudimos a aliviar el dolor con un analgésico, pues bien, podríamos evitarlo simplemente si bebemos las cantidades recomendadas al día. Otro de los beneficios que aporta beber agua, es que mejora la digestión y reduce el estreñimiento, estabilizando la flora intestinal y facilitando ir al baño; además hay que destacar que el beber agua ayuda a reducir el cáncer, al mejorar los mecanismos del sistema digestivo, el flujo sanguíneo o mejorar la hidratación, refuerza la salud de nuestro propio organismo, reduciendo hasta el 40% el cáncer de colón, vejiga, incluso de pecho.
Beber agua, aproximadamente 1,5 litros día, ayuda a prevenir enfermedades mortales
Otro de los beneficios que mayor resultado visible tiene, son los efectos que produce beber cantidades recomendadas de agua en nuestra piel para mantenerla firme; la misma deja de estar seca, sin brillo, y áspera cuando no bebemos lo suficiente, por el contrario, al mantenerla hidratada, la piel se vuelve suave, firme y con brillo. Ayudando a la prevención del envejecimiento de la piel, y a reducir el riesgo sobre la aparición de arrugas o celulitis.
Los especialistas nutricionistas recomiendan beber entre 1,5 a 2 litros de agua al día, para que el organismo funcione correctamente con la adecuada hidratación; por una parte, estudios demuestran que beber abundante agua durante momentos concretos de actividad o del día es beneficioso, por ejemplo, en las comidas es positivo puesto que favorece la digestión y ayuda a diluir los jugos gástricos, así como en los momentos donde practicamos deporte, ya que un alto porcentaje de la composición de nuestros músculos, huesos y sangre, están compuesto por agua, que se pierde durante el ejercicio y deben estar constantemente hidratados.
En las terapias recomendadas para beber agua, es frecuente el ingerir cuatro vasos en ayunas, una vez que nos hayamos levantado para depurar el organismo, si parecen muchos vasos, puedes reducirlo a dos, hasta llegar a la cantidad recomendada; así como beber agua en el tiempo de comida. Los efectos positivos van a ser visibles en cuestión de días.