Los consumidores jóvenes cada día demandan más y más productos minimalistas, es decir productos que se enfoquen en lo esencial, dejando de lado lo superfluo e innecesario. Y las prácticas deportivas no se quedan fuera de esta ola. En particular, el running ha recibido de buena gana esta tendencia, limitando el uso de accesorios, dejando atrás las zapatillas especiales, amortiguadas o con cámara de aire, muy populares en las últimas décadas.
El running minimalista requiere de unos calcetines sencillos, cuyo único propósito es proteger los pies, e incluso en muchos casos, los corredores minimalistas emplean sandalias o simplemente, van descalzos. La intención es correr de la manera en que nuestros pies saben hacerlo, sin nada que altere nuestra pisada natural.
Lo más probable es que si pasas de las zapatillas especiales a las minimalistas, termines encantado/a, puesto que éstas brindan una sensación totalmente diferente al correr. Por tratarse de calzado que no altera la pisada natural, es más amigable con tu biomecánica, lo que reduce el impacto y el riesgo de lesiones. Además, te conecta de manera distinta con el suelo, tu entorno e incluso con tu cuerpo a medida que corres.
Realmente no existe la necesidad de adaptación a esta nueva técnica de running, sencillamente tus pies y tus piernas fueron diseñadas para correr de esta manera. La naturaleza fue sabia al concebirnos, confiemos en que nuestro cuerpo tiene lo necesario para correr y que todo accesorio o indumentaria es completamente prescindible.
Menos Lesiones
El uso de zapatillas amortiguadas fue alterando la manera en que corremos. Lo ideal es correr de metatarsos, es decir aterrizando primero sobre la parte delantera del pie y luego suavemente con el talón. Sin embargo, las zapatillas usadas durante los últimos cincuenta años tanto por corredores profesionales como aficionados, prometen resguardar el pie del desgaste habitual que se produce al correr y de las imperfecciones del terreno, pero en realidad debilitan y deforman los pies, transformando permanentemente la pisada natural de nuestros pies.
Mientras que con las zapatillas adecuadas que carezcan de elementos innecesarios que alteren nuestra pisada, creando en el pie la falsa necesidad de adaptación, lograremos desarrollar por completo nuestros instintos mecánicos. Esta es la forma más segura de conseguir piernas y pies potentes que nos lleven recorrer kilómetros y kilómetros.
Running Minimalista, Zapatillas Minimalistas
Como ya hemos mencionado, las zapatillas minimalistas surgen en respuesta a la tendencia actual de volver a lo esencial. Para bien o para mal, el calzado minimalista se ha puesto de moda en el mundo del running, haciendo difícil distinguir el concepto de zapatillas minimalistas entre tantas opciones disponibles en el mercado. Es importante recordar que, las zapatillas minimalistas se caracterizan por ser ligeras; su fabricación implica muy poco uso de la tecnología. En pocas palabras son zapatillas de correr muy básicas.
Si buscas preservar tu biomecánica y deseas adquirir un buen par de zapatillas minimalistas, hay ciertas características que debes verificar para distinguir las zapatillas de moda de unas verdaderas zapatillas minimalistas. En primer lugar, no llevan sistema de amortiguación, su intención es permitir que desarrolles tu pisada natural y los sistemas de amortiguación resultan contraproducentes para este fin.
Por otra parte, poseen una suela fina lo que supone un pronador y supinador equilibrado. Finalmente, la parte superior suele tratarse de un tejido permeable y poroso que permite la adecuada transpiración. Todo ello con la intención de garantizar que tu pisada no se distorsione cuando corras.
Para adquirir zapatillas minimalistas, no es necesario que acudas a grandes tiendas de artículos deportivos, ni que te centres en las marcas comerciales que todos conocemos, en realidad pueden encontrarse a precios muy accesibles y en versiones artesanales que te ofrecen la misma calidad que otras marcas y modelos de zapatillas para running.
Si tienes curiosidad y nunca has probado este tipo de calzado minimalista, quizás sea hora de intentarlo. No hay necesidad de adaptación, tus pies fueron creados para correr de esta forma. El running minimalista podría cambiar para siempre tu experiencia al correr.