El tabaquismo y el deporte se puede observar desde dos perspectivas diferentes. Por una parte, las personas que creen que haciendo deporte, van a eliminar los efectos tóxicos que produce el tabaco y por otra, la preocupación de cómo afecta a la salud. El tabaquismo, es un daño progresivo calificado como tal en cuanto existe una adicción a la nicotina, los fumadores habituales lo siguen haciendo a pesar de conocer las enfermedades que conlleva y los riesgos que supone, al afectar a todos los órganos del cuerpo. Y esto es así porque el fumador procesa la nicotina una vez que es absorbida por los pulmones, y la misma se transmite al cerebro a través del flujo sanguíneo en cuestión de segundos, acompañado de las partículas que la compone, entre ellas, el alquitrán; proporcionando adicción y placer, ya que estimula que se desprenda sustancias químicas tales como dopamina y adrenalina. Se asocia a la expresión de «un estimulante que tranquiliza» y utilizada en múltiples contextos de la práctica cotidiana ya que se inserta tanto en momentos de ansiedad, debido a que se suele fumar de forma descontrolada para relajarse, o en determinados momentos clave del día, como después de comer para acompañar al café. Por lo que la relación entre tabaco, enfermedad y deporte, se encuentran vinculadas en cuanto al hábito de fumar. Concretamente, los efectos inmediatos de un deportista que fuma, es que aumenta la frecuencia cardíaca y la presión arterial por lo que el corazón tiene que realizar un sobreesfuerzo.
El tabaquismo y el deporte segrega dopamina, la misma sustancia adictiva, pero afecta de forma diferente.
En relación a asociación entre el tabaquismo y el deporte, existe la creencia de las personas fumadoras que piensan que haciendo deporte van a eliminar las sustancias tóxicas del tabaquismo, he de decir, que han caído en una enorme confusión, ya que el fumar segrega dióxido de carbono y el mismo, comparte una gran afinidad con el oxígeno, por lo que una vez que el CO se encuentra en los pulmones, se distribuye por la sangre libremente a través de la hemoglobina, encargada de recoger el oxígeno, transportarlo, y repartirlo por el cuerpo, mediante la regulación del flujo sanguíneo, sin embargo, la hemoglobina, al recoger al oxígeno, debido a su afinidad, se mezcla con el dióxido de carbono, lo que conlleva a la disminución de la capacidad sanguínea de transportar oxígeno y lo que produce es el efecto notable y físico de que el musculo se canse y pierda capacidad, por lo que el deportista tarda más de lo habitual en recuperarse; además de tener en cuenta que el CO no desaparece si es fumador habitual, por lo que no llega a desintoxicarse, lo que lleva a pensar que las personas que caen en este sesgo perceptivo, es porque buscan razones para justificar la falta de voluntad para dejar de fumar; o cuantas veces no habéis escuchado el comentario de «para el año que viene dejo de fumar´´ y así pueden pasar años.
La diferencia entre el tabaquismo y el deporte, es que seguir fumando y practicar ejercicio, no elimina las sustancias tóxicas del tabaco.
La duración media de la nicotina en el cuerpo es de dos horas y existe una relación directa entre fumar y hacer deporte, ya que a medida que aumenta el consumo de tabaco disminuye el oxígeno en sangre y por tanto, la capacidad de hacer ejercicio físico. Muchos de los fumadores empedernidos reconocen que no practican deporte. A esto mismo, hay que añadir varias connotaciones, ya que las enfermedades crónicas que desarrolla el tabaquismo, como son las más frecuentes cardiovasculares, como enfermedad coronaria y el infarto, también las enfermedades obstructoras del pulmón, como son la bronquitis crónica y enfisemas, cáncer de pulmón y vascular cerebral, no aparecen a corto plazo, sino que según los estudios realizados, empiezan a ser notables una vez pasado unos 10 años, por lo que aunque parezca inverosímil, los jóvenes fumadores, pueden practicar deporte de forma habitual y no padecer directamente síndrome alguno acerca de este tipo de afecciones, ya que las mismas se van desencadenando de forma paulatina.
Del síndrome del tabaquismo el menos conocido es el enfisema pulmonar, el cual es incompatible con cualquier tipo de rendimiento físico, sucede porque el tabaco contiene unos componentes tóxicos calificados como enzimas que a través de la inhalación del humo, actúa destruyendo la proteína con la que está formada la capa protectora del pulmón. Por lo que, el desgaste de la misma, deteriora la capacidad pulmonar, y consecuentemente, perjudica al flujo sanguíneo pulmonar, necesario para la práctica del deporte, disminuyendo la probabilidad de que se produzcan las reacciones bioquímicas adecuadas para que se aporte oxigeno a la sangre, lo que incapacita la actividad física rutinaria y la deportiva pasa a un plano inalcanzable.
La compatibilidad entre el tabaquismo y el deporte, es que el segundo puede combatir a la adicción a la nicotina.
Cómo ya hemos visto, la práctica del tabaquismo y el deporte, no es compatible; el fumar puede ocasionar incluso la muerte y graves enfermedades irreversibles, por lo que muchas personas se han planteado dejarlo, para ello, el deporte es una herramienta eficiente para dejar de fumar, los beneficios que aporta en relación con las secuelas que deja el tabaco, es principalmente en cuanto al hábito, ya que al hacer deporte se segrega endorfinas, misma sustancia que ayuda a eliminar la ansiedad, y sustituye no coger un cigarrillo cada vez que tengamos una preocupación; por lo que el cambio de hábitos es fundamental para dejar de fumar, y por ello, el deporte ocupa un papel importante. También hay que tener presente que dejar de fumar engorda, ya que la falta de nicotina elimina el aumento de la frecuencia cardiaca, por lo que es recomendable hacer ejercicio; en cuanto al tipo de deporte adecuado para eliminar la nicotina y el dióxido de carbono en sangre, es hacer deporte cardiovascular, como puede ser montar en bici o correr, que reclama una gran cantidad de oxígeno al cuerpo, incrementa el ritmo cardíaco, mejorando la frecuencia respiratoria y favorece una sudoración saludable ayudando a eliminar toxinas. Por lo que después de haber leído esto, ponte las pilas y mediante el deporte saludable, deja de fumar.
Referencias