Aunque lo importante para hacer frente al estrés se centra en acercarse a su origen y encontrar las forma de minimizar su causa o el modo de vivir con ella, una alimentación sana y regular puede ayudar a que organismo reduzca su estrés, o por lo menos sus efectos negativos.
Dejando de la lado la fuente física o emocional del estrés, el organismo hace frente a este expulsando adrenalina, una hormona que al mismo tiempo muestra un conjunto de respuestas hormonales y nerviosas por todo el cuerpo que nos mantiene atentos para la huida o la lucha. Aunque la mayoría del estrés que se sufre en el actualidad no necesita de una respuesta inmediata física, el organismo sigue provocando reacciones obsoletas. Desde el principio de la ansiedad, se acelera el ritmo cardíaco, la sangre fluye hacia los músculos, espesándose curando las heridas con anticipación y la visión se agudiza.
El estrés físico para el que estas respuestas son muy eficientes, es normalmente pasajero; después de este estrés, los niveles de hormonas se restablecen y el sistema nervioso vuelve a su estado más tranquilo. A veces, el estilo de vida que llevamos en la actualidad conlleva a que suframos más estrés mental durante bastante tiempo, que puede provocar que el organismo se encuentre en un estado reactivo al estrés durante intervalos largos.
Todos los efectos del estrés no son reconocidos en las necesidades de nutrición, pero se conoce que en estas situaciones, el metabolismo puede estar bajo una presión fuerte. Este estado puede afectar gravemente al sistema inmunitario; reduciendo las defensas y convirtiéndonos en seres más vulnerables enfermedades e infecciones.
¿A veces te siente estresado y comes de más? Según algunas investigaciones, no eres la única persona a la que le sucede. Un tercio de la población modifican su alimentación durante periodos de estrés. Y no es sorpresa que la comida que ingieren, en momentos de estrés, es la comida con altos niveles de carbohidratos refinados y azúcares.
Cuando estamos en época de estrés, compramos alimentos que nos reconforten lo más rápido posible. Pero el problema es que la gran parte de esta comida provoca cambios hormonales y picos de azúcar en sangre, que pueden provocar que seamos proclives al estrés. Hay una gran diferencia entre aprovechar las características calmantes de los alimentos y usar cualquier alimento como un anestésico emocional. Cuando te estreses, intenta comer los alimentos que te presentamos a continuación.
Carbohidratos complejos
Los alimentos que contienen carbohidratos complejos como la avena, provocan que el cerebro genere serotonina, una sustancia química que provoca una relación importante como para poder hacer frente al estrés. Este tipo de nutrientes también permiten equilibrar los niveles de azúcar.
Omega 3
Se conoce que este nutriente permite minimizar la respuesta a la inflamación. Por lo que el omega 3 interviene en nuestro organismo a que podamos actuar ante el estrés de manera más flexible. Varias investigaciones han confirmado que tomar omega 3 ayuda a proteger las neuronas contra la lucha del estrés crónico. Algunos alimentos que contienen omega 3 son el atún en lata, el salmón, la linaza, las sardinas y las semillas de chía.
Vitamina C
Un alimentos con alto contenido en vitamina C son las naranjas, que permite reducir los niveles de la hormona del estrés, el cortisol, ayudando también a que nuestro sistema inmunológico sea más fuerte.
Potasio
Una de las respuestas del organismo ante el estrés es subir la presión arterial. Una de las mejores maneras de minimizar la presión es tomar potasio suficiente. Aunque sabemos que los plátanos contienen una gran cantidad de potasio, no podemos olvidar el aguacate. Medio aguacate contiene más potasio que un plátano de tamaño medio.
Flavonoides
Se ha investigado mucho sobre el cacao y se ha descubierto que los flavonoides que contienen pueden ayudar a que los adultos con grandes esfuerzos mentales tengan mejor humor y una mente más clara. Para sacarle provecho a estos efectos, trata de que el chocolate sea en su mayor parte cacao.
Magnesio y zinc
Las nueces que colaboran controlando el cortisol, manteniéndolo en niveles bajos, contienen niveles altos de magnesio y zinc. Se ha investigado sobre las personas que ingieren poco zinc y los resultados son individuos dados a la depresión y la ansiedad. Los alimentos con zinc permiten reducir el estrés.
Té verde y manzanilla
Se ha demostrado que el té verde contiene aminoácidos como la teatina, que aunque proteja de algunos tipos de cáncer, también trabaja como estimulador cerebral que permite aumentar el rendimiento del cerebro. Es mejor tomar el té verde por la mañana y por el día ya que contiene cafeína. Además de tener la capacidad de relajar, el té verde ha sido el blanco de numerosos estudios por ser un claro estimulante cerebral.
Por su parte, la manzanilla si se ingiere como suplemento, permite minimizar los síntomas de depresión y ansiedad. Tomar una taza te permite relajarte durante unos minutos y ayuda a dormir.